MAURICIO PAZ VIOLA  ARTISTA PLASTICO URUGUAYO

Mauricio Paz Viola, propone una mirada nueva, con la presentación de imágenes propias e increíbles, ofrece un paisaje de maravillosa invitación a la imaginación, físico y síquico, metáforas orgánicas, en mundos diáfanos, etéreos y luminosos, con una grafología lírica personal como pocos, para lograr la belleza perfecta que nos propone desde su universo interior.

El impulso creativo esta en toda la tela y en sus logradas transparencias, en su proposición insistente, pero siempre nueva, de este mundo propio, al cual nos abre una ventana a su escritura, que es pintura y dibujo al mismo tiempo, que logra transmitir con maestría y espontaneidad, así nos hace testigos silenciosos de su universo, donde el espacio pierde sentido y la forma se renueva infinitamente para ser un movimiento constante y perpetuo a los ojos del observador de sus obras.

Paz Viola huye de la interpretación facilista, el crea su propio paisaje, dibujando nuevos horizontes de inspiración jovial, con efectos propios de luz y sombra, de colores ensoñadores en sus texturas y sus formas.

Muestra así su faz ansiosa de hombre-artista, ansiosa por revelársenos, cada una de sus obras parece un fragmento de una composición única, y de su secreta intención que es dejar ver aquel mundo interno de su imaginación que le anima.

Su color no es un color que venga de la naturaleza, es inventado, generado tal vez en extrañas visiones de sus sueños y sus vuelos poéticos colorísticos.

Luces y destellos que surgen de azules y anaranjados que parecen invitar a entrar por un pasadizo al mundo de Paz Viola, fulgores sorpresivos que llevan a lo mágico, a ese mundo inventado y fabuloso, solventado por un color trabajado con maestría, ofrece una naturaleza “dafare”, es decir en tren de realizarse, unas formas que al entrelazarse, al entreverarse se reinventan, en la mezcla de sus colores, nacen volúmenes nuevos, bullentes de perfecta transparencia y luz.

Paz Viola nos propone un paisaje dinámico y fulgurante, personalísimo, pues Paz Viola solo se parece a el mismo, de ahí la importancia de su obra, total y absolutamente original, a partir de allí su valor como autor y creador joven, pues evidentemente los años que vendrán aumentaran su maestría, que ya se deja ver, y seguramente lo llevara por nuevos derroteros hacia sus mundos inventados ofreciéndonos nuevas posibilidades para el asombro ante su obra.

Es difícil pasar por alto su obra, no mirarla y adentrase en ella, dejarse embrujar por su forma de hacer y ver, este solo hecho lo encumbra como un autentico valor plástico, es imposible no querer recorrer esos recovecos inventados , encontrar en ellos sus luces o sus oscuridades. La inercia no cabe ante su obra, es inevitable su contemplación y aun cuando sus mundos se multiplican no existe monotonía en su propuesta, pues es un gran paisaje, una gran visión, que se va completando con cada pieza, se va haciendo reconocible, amigable, y nos va hablando en otro lenguaje, el de Mauricio Paz Viola.

Sus líneas vibrantes llevan al triunfo de la forma y el color, la magia emerge de todas sus invenciones, una magia épica que se entrega al movimiento de la forma y a la vitalidad y transparencia del color.

Mauricio Paz Viola emprende fuga en trayectoria creativa pura, el es su propia influencia, lo cual es prueba vital de su valor como artista.

Esa espacialidad lograda en sus obras, son el inicio del viaje para quien es su espectador, su técnica impecable, un anzuelo, al cual es difícil escaparse.

Paz Viola es poseedor de una sensibilidad colorística , una profundidad y sensualidad de texturas altamente originales, liberado asimismo de convencionalismos, Mauricio nos ofrece su misterio existencial en cada pincelada, generando fantasías que se pasean entre lo conocido y lo desconocido, sus actos de ilusionista de nuevas dimensiones en sus telas abren su discurso de autor, Paz Viola nos ofrece un camino renovado de un universo creativo que solo existe en su espíritu y subconsciente, por tanto solo proviene de el , y solo por su medio crecerá y se multiplicara hasta la perfección.

Es Paz Viola un buen ejemplo del medio al servicio de la idea, de sus desleídos horizontes,de sus colores rosados y naranjas que transmutan en enigmáticas oscuridades y luminosos destellos, como radiografías de su imaginación ,de su espíritu .

Paz viola sale airoso de su audacia experimental, con su propia y personal forma de hacer, es solo representación de su autentica esencia de ser humano y artista.

(Martín Astorga )